
IPO es una organización de acompañamiento internacional e información en Colombia, en solidaridad con organizaciones en resistencia no violenta.
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En Arauca los días 8 y 9 de septiembre la asociación campesina de Arauca (ACA), que trabaja en el departamento en defensa del territorio y en defensa del derecho humano, organizó cursos de formación y autoorganización entre las veredas de los municipio de Tame, Arauca, Arauquita y Fortul.
Los temas enfrentados fueron:
Referentes históricos de la Lucha Campesina
Reseña de la asociación campesina de Arauca
Sistemas prácticos de defensa de derechos humanos
Taller de Agricultura Orgánica
Informe de tesorería y plan a seguir
Elección de nuevos lideres municipales de Tame.
Paro nacional 12 octubre
Evidentes fueron las finalidades del trabajo presentado por parte de ACA, según la cual se advirtió la necesidad de fortalecer las bases de resistencia civil por medio de una mejor organización interna.
En eso la participación de IPO representó una posibilidad de intercambio de aprendizaje y conocimientos con los campesinos araucanos.
En la presentación del cuadro histórico de Arauca se explicó que, a raíz de lo que fue el cáncer de la corrupción en los anos ’60 propuesto desde el gobierno, las juntas comunales empezaron a ejecutar proyectos de inversión social mientras el estado fue permeable en frente a la corrupción y algunos dirigentes públicos con los administradores comunales se robaron las financiaciones.
Para recoger todo el sentido del campesinado araucano, se puse la tarea de conformar una asociación; se creó un comité de impulso de 8 personas en Aguachica, municipio de Aguachica, donde se empezó a promover la creación de una asociación que recogiera todas las inquietudes y necesidades de los campesinos del departamento, así se consiguió conformar en 5 municipios comités municipales y veredales, y en la cabecera municipales se crearon comités barriales, empezando el trabajo con el objetivo de desarrollo y de una real inversión en favor de la comunidad campesina por parte de la compañía petrolera.
En frente a la actual situación de indiferencia estadal a la que es la explotación extranjera del terreno y las fumigaciones arbitrarias que eliminan lo poco que representa la sobre vivencia alimentaría y comercial de las comunidades, el taller de Agricultura Orgánica fue retenido indispensable en estos días de encuentro y formación “por la razón de tener nuestra tierra en mala condiciones”.
Por tanto agro-toxico la gente tiene la necesidad de devolver a fortalecer su pueblo, conservando la tierra limpia, sacando buenos productos y mejorando el medioambiente.
Una propuesta de resistencia a las transnacionales de químicos que, además de ruinar la tierra, financian la guerra y la matanza de los pueblos araucanos.
Lucha que sigue adelante, conciente de las amenazas que pueden derivar, porque todos son ya objetivos militares en el panorama de fuerte represión por parte de la doctrina de Seguridad Democrática y sus medidas políticas contra el campesino.
Una clara política Uribista, con mas seguridad por los dueños del país, el 10% del población.
Una estrategia llevada adelante y apoyada por la falta de una política agraria estatal, con el adelantamiento, en cambio, de tratados comerciales. El TLC por los campesinos representa la obligación al monocultivo y a la agroindustria, la medida para llenar las hilas de esclavos del capital, la destrucción de la autonomía agraria de las comunidades.
“No serán socialmente justas y humanas, ni agroecologicamente sostenibles, ni tecnológicamente apropiadas, todas aquellas practicas de agricultura orgánica que todavía permiten la continuidad de dependencia económica campesina.”
Para los críticos que todavía retienen la agricultura orgánica no económicamente viable un ejemplo presentado fue esto.
Una caja de banano para exportación, producido químicamente, vale $ 2.5, producirlo cuesta $ 2.
Una caja de banano producido orgánicamente vale $ 4, cuesta producirlo 2.5 $
La única alternativa que tienen los campesinos para sobrevivir y seguir siendo agricultores independientes y poder aplicar soberanía alimentaría se refleja en sus constantes palabras “dar la pelea moralmente, creer en la lucha popular”.
Y no sale de esta reivindicación la necesidad de conocer los instrumentos para una denuncia a los derechos humanos. Capacitarse de denunciar agresiones, robos de cultivos o ganado, violaciones constantes por mano militar. Especificar, por ejemplo, quien es el agresor, desde El batallón hasta el reconocimiento físico. Ya porque una estrategia de los soldados es cambiarse la divisa col nombre así para confundir el reconocimiento y hacer caer la denuncia.
A final se hizo enfoque sobre las tareas y responsabilidades de cada miembro, nombrando los líderes del comité municipal y coordinándose para el próximo Paro Nacional del 12 octubre.
Enfrentar dificultades y organizarse es los objetivos de la gente al interior de la asociación.